El Quincho Ilwen Sabores del Campo, está ubicado en la comuna de Quilaco, sector San Ramón en la Región del Biobío, es una cocinería rustica construida con madera nativa, que se define por el rescate de gastronomía mapuche y campesina, brindando una experiencia gastronómica única y una alternativa en un entorno rural.
Aquí los clientes de Donatila Antinao Levipan, pueden disfrutar de platos como cazuela con pollo de campo, carne a la cacerola en horno de leña, ensalada de quínoa, piñones, changle, digüeñes; acompañados de sopaipillas, pan amasado pebre, o con un trozo fresco de quesillo de la zona, tortillas, asados de corderos y los postres de antaño como el mote con leche, leche asada o castaña en almíbar.
En este lugar privilegiado, los visitantes pueden observar el entorno natural y escuchar el ruido de los pájaros, aves y de los árboles; pasear y conocer los animales que pastan en el predio.
Dejar un legado de amor
Cuando habla de la motivación para dar vida esta emprendimiento turístico, Donalita nos explica: “Quiero dejar a mi hijo Tomas –con capacidades diferentes-, un legado donde él pueda insertarse en este emprendimiento familiar. Además por mi descendencia indígena quise rescatar la comida étnica para conservar la pertenencia de mis antepasados, que fueron sus enseñanzas traspasadas y conservadas a través del tiempo.
Estudió en la región de la Araucanía, trabajó en el gran Hotel Pucón por más de diez años y “la experiencia me dice que es factible vivir (económicamente) del turismo”, explica.
El año 2014 a través de un fondo concursable se adjudicó el proyecto para la construcción “Quincho Ilwen sabores del Campo”. El trabajo lo realizó su esposo, en cada detalle está su mano de obra, por esto es parte de su familia e historia.
También es el principal ingreso económico familiar. Confía en el polo de desarrollo turístico potente que existe en las comunas de Santa Bárbara y Quilaco que es el Parque Angostura, que es visitado por un gran número de personas (112.000 en la temporada estival pasada), lo que permitió concretar su anhelo de emprendimiento, generando un negocio factible para el sector de San Ramón, que viene a potenciar el turismo y la gastronomía étnica- campesina, generando fuentes de trabajo y desarrollo local.
El crecimiento de Quincho Ilwen sabores del Campo, desde su inauguración ha ido en aumento. Comenzó atendiendo a 10 personas, y gracias a las preferencias de clientes habituales y a los nuevos clientes, hoy tiene capacidad para recibir a 35 personas. “Mis clientes han valorado el rescate de la comida ancestral mapuche y campesina, la infraestructura en madera rustica nativa, el entorno natural que se inserta en una zona rural de la comuna de Quilaco. La característica principal de Ilwen es la calidez del servicio, la gastronomía y la calidad de nuestros productos que son adquiridos a los productores locales de la zona , esto se ve reflejado en el aumento de las ventas, lo que nos ha permitido contratar dos trabajadores permanentes y part time cuando la actividad lo requiere (matrimonios, bautizos), mejorar nuestra calidad de vida, además diversificar los servicios prestados a instituciones y empresa fuera de nuestro local y eso se debe principalmente a la calidad de los productos y el servicio y al sello que hemos puesto a nuestro emprendimiento”.
Inclusión y Nuevas recetas
Aprovechando los recursos de la tierra como el changle, digüeñes, piñones, castañas y entre otros, ha incorporado nuevas recetas; y además está constantemente capacitándose para ofrecer un mejor servicio.
Además en el diseño y construcción del Quincho Ilwen sabores del campo, se consideró que fuera inclusivo, permitiendo el acceso de sillas de ruedas a través de una rampla con una pendiente suave y puerta interior espaciosa, disponer de un baño accesible para los clientes con alguna capacidad diferente.
Queremos rescatar las tradiciones mapuches y campesinas, y esto se ve reflejado en la gastronomía y su preparación de los alimentos, como es la incorporación de productos naturales y sanos que eran utilizados por mis ancestros como el piñón, los catutos, changle, digüeñes, pollos de campo, hortalizas cultivadas en la huerta, lo que permite dar a conocer la gastronomía con una identidad local y que ha sido traspasada de generación en generación.
Además en el Quincho se han incorporado cuadros e imágenes con el significado de tejidos o signos para dar conocer nuestra cultura mapuche a nuestros clientes, libros en mapudungun- español para aprender nuevas palabras y recetas, además muestras de vestimenta y joyería mapuche (trapelakucha, trarilonko), piedras de moler, paletas y wanko.
Perseverancia y trabajo
Mi experiencia de vida me ha enseñado que con perseverancia, trabajo y motivación constante, es posible concretar los sueños, y el turismo es una forma de lograrlo. Generando desarrollo local, personal y familiar.
Hoy puedo manifestar con orgullo que Ilwen sabores del campo es un referente para las mujeres de mi sector, ya que al proveerme de productos de la zona, ellas también han crecido conmigo no sólo en términos económicos, sino en su crecimiento personal, generando así un encadenamiento productivo y una generación de redes comunitaria.
El gran trabajo y esfuerzo aportado día a día a mi emprendimiento se ve recompensado en mi propio orgullo, en la admiración de mi familia y la satisfacción de mis clientes al término del servicio.
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