La aventura es realizar una travesía por los ríos patagónicos, navegando como lo hacían los colonizadores, con la cultura y la naturaleza como insumos irremplazables.
Cinco días navegando en la Patagonia, haciendo rafting a distintos niveles en el río Baker. Esto se traduce a cinco días que no se borrarán de los recuerdos del viajero que decida bajar las aguas más caudalosas de Chile junto a Christian Medina y Patricio Astudillo, propietarios de la empresa Baker Patagonia Aventura, ganadora de la tercera versión del concurso Más Valor Turístico.
Esta experiencia invita al turista a navegar el río Baker desde las cercanías de su nacimiento en Puerto Bertrand hasta su desembocadura en Caleta Tortel, en una travesía que se realiza en balsas inflables propulsadas a remo que siguen las corrientes del río. En definitiva, recorrer un río prácticamente completo al ritmo de la naturaleza, haciendo de la cultura y la naturaleza insumos únicos para los que buscan conocer y descubrir lugares imperdibles.
Llegando a la zona, la primera sorpresa es el color del lago Bertrand. Christian Medina dice que “es increíble la vista desde el muelle. Y hacia la casa y oficina, se aprecia un estilo muy rústico. Esto porque el lugar que da vida a este emprendimiento es la casa que fue construida por el padre Ronchi, conocido por su obra en la Región de Aysén”, lo que se resalta el patrimonio de la zona.
Durante los cinco días de recorrido se pueden apreciar distintos biomas, partiendo desde la estepa patagónica hasta llegar al bosque siempre verde. La empresa de Christian y Patricio ha tratado de mostrar, a través de este producto turístico, toda la naturaleza del río y la cultura de los gauchos que hacen su vida junto al Baker.
Según Medina, empresario patagón de treinta y seis años, “el producto se basa en la sustentabilidad para su funcionamiento, ya que la cultura y la naturaleza son los elementos principales y sin ellos el producto deja de existir”. Es que la sustentabilidad turística es mucho más amplia que el solo cuidado por el medio ambiente, también tiene relación con el impacto de un producto en los ámbitos cultural, social y económico en el lugar en que se desenvuelve.
Y eso lo saben en Baker Patagonia Aventura. “La sustentabilidad se debe hacer parte de los procesos y del comportamiento, para que así los que aprendan el concepto lo lleven en el ADN de su trabajo”, afirman. A modo de ejemplo, todos los residuos generados por este viaje se llevan de regreso a Puerto Bertrand y, asimismo, la propulsión de las balsas es mediante remos, por lo tanto, no se usa combustible. Por otra parte, sus proveedores son locales y todas las personas que intervienen en el desarrollo del producto son auténticas culturalmente, debido a que son las mismas familias de los colonos que siguen viviendo en estos remotos lugares.
Sobre el aspecto económico, Christian revela que “el producto únicamente es viable si se conservan la cultura y el ambiente, también en su cadena de valor: sobre el 70% del valor por turista se distribuye entre los prestadores de servicios que brindan traslados en caballo, pilcheros para carga en el sector Saltón del Baker, alojamiento rural, asado al palo, tortas fritas, verduras locales, traslados en Caleta Tortel, cenas, gastronomía local en general”.
Vivir el paisaje desde otro ángulo
“La aventura se detiene en lo esencial de la experiencia, que es recorrer un lugar a un ritmo diferente, vivir el paisaje desde otro ángulo. Con esto generamos una experiencia en relación con los antepasados patagónicos que realizaban esta ruta remando para conquistar el complejo territorio”, aseguran en Baker Patagonia Aventura.
Lo que ofrece esta empresa aysenina se diferencia en que son pocos los productos turísticos que se desarrollan en recorrer los ríos de Chile y que incluyan pernoctación en distintos destinos, principal complejidad de su operación. Con Travesía del Río Baker, los turistas pueden pernoctar tres noches en campamentos cerca del caudal del río, además de una noche en Puerto Bertrand y otra en Caleta Tortel.
La diversificación de experiencias es el sello de esta travesía. El producto integra distintos servicios locales y atractivos naturales y culturales, lo que permite que el turista admire y reflexione sobre la belleza del entorno y, de paso, valore las historias de esfuerzo y coraje de la gente que habita esta tierra.
El viaje se inicia desde la estepa patagónica, en el valle Chacabuco, cercano al recién creado Parque Patagonia, para seguir hasta llegar al mar, en las cercanías de Caleta Tortel. “Este viaje –señala Christian– está dirigido a personas que gustan del contacto con la naturaleza y vivir una experiencia de vida, pero por sobre todo que son capaces de integrar un equipo”.
En este recorrido se muestran, además, atractivos de jerarquía internacional, como Campos de Hielo Norte, monumento histórico recientemente protegido, o el Corte San Carlos. El producto también está asociado a rutas de interés científico, donde se muestran los lugares en que se produce el fenómeno GLOF o vaciamiento de lago glaciar. La experiencia turística es completa.
–¿Cómo fue el proceso para establecer su experiencia turística?
–Estuvo lleno de alegrías y cosas buenas. Al comienzo, con más ganas que todo y siempre con el apoyo de nuestras familias. Es lindo recordar y darnos cuenta de que simplemente todo pasó y el emprendimiento se concretó. La primera temporada fue el año 2007 y comenzamos haciendo rafting en el río Baker. Nos ganamos un premio de Sercotec, con lo que compramos una balsa y otras cosas, de esa manera adquirimos nuestro primer equipo completo para ocho personas.
Para Christian Medina, “lo más gratificante ha sido conocer gente de distintos lugares del mundo, formar amistades que perduran hasta hoy y notar que la mayoría de las ellas quiere un mundo mejor. Pero más que cualquier cosa, lo mejor es saber que nuestra cultura siempre está presente y que el profesionalismo debe ir acompañado de la pasión por lo que se hace”.
Puedes conocer más de este producto en www.bakerpatagonia.cl. Contáctalos al teléfono +569 8 817 75 25.
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