El concurso Mujer Empresaria Turística 2017 distinguió a mujeres que emprendieron en turismo e incorporaron en sus empresas a la sustentabilidad como parte de sus buenas prácticas. Catalina fue la empresaria destacada de la Región de Magallanes y la Antártica Chilena.

Catalina Juana Jaksic Obando es socia y directora de finanzas de un hotel en la Región de Magallanes. Pero su idea de emprender en turismo nació mucho antes. Aprovechó una oportunidad de negocio y comenzó a arrendar cabañas a fines de 1996. Hoy esas cabañas se han transformado en un hotel de cuarenta y cuatro cómodas habitaciones perfectamente equipadas y que brindan un servicio de un alto nivel.

Se trata del Hotel del Paine, ubicado a orillas del río Serrano con encantadoras habitaciones y mueblería rústica, lugar de descanso ideal para disfrutar de la gastronomía típica de la región mientras se admira la cordillera de Torres del Paine.

En 2002, luego de adquirir unos terrenos mediante Bienes Nacionales, Catalina comenzó a poner en marcha su sueño de un hotel en donde las personas pudiesen disfrutar de un paisaje majestuoso, como lo es este destino reconocido a nivel mundial. Dice que “comenzó como un hotel de veintitrés habitaciones y hoy ya es un hotel con muchos servicios adicionales, además de la hotelería”, pues, en sus instalaciones, proporciona el servicio de información turística y datos sobre la zona que ayudan a los visitantes a organizar sus excursiones.

Las acogedoras habitaciones que implementó esta empresaria de sesenta y ocho años están equipadas con calefacción, escritorio, baño y ducha privados, y la mayoría posee increíbles vistas al paisaje patagónico. Y más allá de eso, el Hotel del Paine se ha preocupado de mantener medidas medioambientales, en sus instalaciones tiene una planta de tratamiento de aguas servidas y gestión de residuos. Catalina Jaksic cuenta, además, que “separamos la basura orgánica y la no orgánica para crear un compost para nuestra huerta, que nos provee de gran parte de los vegetales”.

En otros ámbitos de la sustentabilidad, como el social, el cultural y el económico, Catalina resalta que trabajar con proveedores locales es de suma importancia para su emprendimiento, ya que de este modo se pone en valor la cultura regional. Cerca del 50% de nuestros proveedores son locales y más del 70% de sus trabajadores son locales. En este mismo sentido, asegura que “la asociatividad y el trabajo conjunto con asociaciones gremiales me sirvió mucho para incorporarme en el mundo del turismo”.

Uno de los grandes dolores de cabeza que tuvo Catalina al comenzar su proyecto fueron las dificultades de accesibilidad del territorio austral, principalmente por el traslado de materiales para poder construir este alojamiento. Si bien destaca que emprender no es tarea fácil, menciona que “si se es constante, perseverante y se trabaja en equipo, estas dificultades disminuyen y son cada vez más sencillas de resolver”.

El llamado que hace esta empresaria magallánica a todas las mujeres que desean emprender es que no hay que rendirse cuando los tiempos están difíciles, ya que “quienes sobreviven esos tiempos son los que permanecen”.