Carol Carpintero Rodríguez, ganadora del concurso Mujer Empresaria Turística 2021 por Iquique Viajero, agencia de viajes cuya experiencia tiene como pilares al turismo, el arte y la cultura.
Soy Carol Carpintero Rodríguez, apasionada por el turismo y, como mujer tarapaqueña, quiero trabajar para que mi región se conozca en el mundo entero. En mi trayectoria laboral y profesional, adquirí experiencias en hotelería, emprendimientos y múltiples servicios. Después de diez años, logré concretarlo: Iquique Viajero se inició cuando tenía veintisiete años, con la intención de crear un concepto turístico nuevo y único en Iquique.
Todo fue tomando forma cuando me atreví y reuní el dinero suficiente para arrendar una gran casona en calle Baquedano. Se presentaron miles de dificultades, pero logré gestionar y reunir todo lo que me apasiona en un solo lugar: el turismo, el arte y la cultura son los pilares y el corazón que dan vida a este sueño que hoy es una realidad.
Para resistir a esta crisis, me dediqué a distintas actividades comerciales, a la espera de retomar. Nos sumamos al Certificado de Compromiso ‘Confianza Turística’ de Sernatur, con la finalidad de entregar confianza en la operación en el contexto de pandemia. Además, dediqué tiempo a observar y estudiar las estrategias adoptadas por turoperadores de países que se vieron afectados antes que el nuestro y noté lo importante que es la digitalización de mi oferta turística.
Fue así que concentré mi esfuerzo en aprender y desarrollar la comercialización de Iquique Viajero a través de redes sociales, focalizando mi oferta al mercado local, debido a las limitaciones de desplazamiento tanto nacional como internacional. Frente a la paralización del mercado turístico, diseñé estrategias para rentabilizar la línea de negocio del arte de Iquique Viajero, creando y desarrollando talleres, con los aforos y protocolos establecidos, y comercializando insumos y materiales para dichos talleres de renovación, reciclaje y reutilización de muebles.
Iquique Viajero está formado por múltiples servicios del rubro turístico, desde alojamiento, traslados, excursiones y paquetes turísticos hasta arriendo de bicicletas, sala de reuniones y custodia. Esta es una experiencia única dentro de una casona patrimonial, perfectamente restaurada. Prontamente, contaremos con un salón de té, el cual se proyectó inicialmente para el patio interior, pero que ahora será en el frontis del lugar. Aquí podrán degustar productos típicos de la zona, también se reactivarán exposiciones culturales y artísticas para potenciar al artista local, así como también la venta de artesanía regional.
Somos una solución integral a las necesidades de nuestro principal cliente, que es el viajero, ya sea por viaje de trabajo o entretención. Los clientes son nuestra comunidad y han dejado sus testimonios en Google, evaluándonos con cinco estrellas. Instituciones públicas y privadas han creído en este lindo proyecto: me han otorgado financiamiento para el crecimiento y la reactivación de mi negocio, como Crece Turismo en 2019, Impulsa Turismo en 2020 y Reactívate Turismo en 2020.
Cuando estaba en pleno desarrollo del proyecto, quedé embarazada, lo que dificultó mi estado de salud y mi desarrollo profesional. Por ser una mujer que defiende sus espacios, me ha tocado muchas veces lidiar con personas mal educadas, con espíritu de superioridad y que te pasan a llevar solo por creer que eres débil, a pesar de que soy una mujer que lleva un negocio. Sin embargo, al ser la jefa de hogar, el ímpetu ha sido mayor, por lo que no he tomado importancia a ese tipo de barreras de género.
Esto no significa que no he estado exenta de millones de dificultades, pero las he ido resolviendo y enfrentando con harta creatividad y motivación. Ser mujer es un desafío diario, las cargas emocional, económica y física se llevan en silencio. Reuní a todas las agencias y turoperadores de la región, con el fin de asociarnos y potenciarnos, siendo una de las motivadoras en la formación de la actual Mesa de Turoperadores de Tarapacá y la única mujer del grupo.
Me tocó un periodo difícil y complicado de la vida. Soy jefa de hogar, fui mamá un mes antes de la pandemia, cerré la agencia y tuve que despedir al personal. A los cuatro meses de tener a mi bebé, decidí mudarme con mi familia al local, para no perderlo. Me tocó la ruptura de mi relación, continué sola con mis dos hijos de trece años y seis meses. Eso no quitó la motivación de seguir adelante y perseverar en este rubro.
A la espera de la reactivación y la supervivencia, me dediqué a comercializar de todo: oficinas virtuales, té y café en el frontis, talleres de renovación y reciclaje de muebles, venta de pinturas e insumos, árboles de navidad en madera, pan artesanal, etcétera. Formé redes asociativas con emprendedoras y operadores turísticos locales. Creo que el género femenino con sus múltiples roles tiene una capacidad única de tomar conciencia y rápida acción ante cualquier dificultad. Soy la única agencia con oficina física en calle Baquedano. Espero con ansias y tengo muchas nuevas ideas que implementar y aportar para el turismo de Tarapacá.
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